Despierta el deseo, con un masaje sensual
El tacto es la forma más antigua de comunicación. Además, revela las capacidades insospechadas del cuerpo para recibir y dar placer. El refinamiento y la mejora de este placer lleva a las personas a despertar sus capacidades latentes de experimentar algo nuevo y que sea intenso.
Según, Zentopía, centro de masajes eróticos Madrid explican que las personas necesitan despertar su sensualidad y están capacitadas para experimentar orgasmos y no sólo de placer, sino de sensualidad. Es un don divino que se puede utilizar para redescubrir el cuerpo.
Antiguamente en Oriente, el masaje formaba parte de la higiene corporal diaria, al igual que el baño, la gimnasia y el cepillado de dientes. Además, el Kama Sutra menciona que el masaje erótico es un ingrediente vigorizante que puede incluirse en los juegos preliminares.
Lamentablemente, la civilización occidental considera el tacto como un tabú y hacer el amor es como un medio práctico para liberar las supuestas tensiones y el estrés acumulados. Esta visión sobre hacer el amor y el tacto determinó que el hombre moderno perdiera la capacidad de disfrutar de su propia sensualidad.
De hecho, para muchas personas el tacto se ha convertido en un lenguaje perdido, mientras que sigue siendo una forma esencial de alimento, una fuente de salud, relajación, alegría y felicidad.
Sin embargo, ¿Qué es la sensualidad? En el verdadero sentido de la palabra, sensualidad significa sensibilidad sensorial. Un masaje verdaderamente erótico pretende que la persona redescubra su sensibilidad sensorial y que redescubra la capacidad de disfrutar de los placeres de los sentidos.
No hay que tomar la excitación sexual por sensualidad. El masaje erótico abre las puertas del universo sensorial. Por eso hay que considerarlo y experimentarlo desde el punto de vista correcto.
El hombre moderno se sorprenderá al saber que, para el ser humano, las sensaciones táctiles recibidas a través de las palmas de las manos y la piel son los elementos catalizadores básicos de una experiencia sexual completa.
Sin embargo, para experimentar y redescubrir la propia sexualidad habrá que centrarse en las sensaciones.
¿Cuáles son las reglas básicas en el masaje erótico?
Abrir la mente hacia la relajación y el placer
Cuando te prepares para dar o recibir un masaje, lo primero que hay que hacer es apartar la mente de todos los problemas cotidianos. Decirte a ti mismo que ha llegado el momento de salir del ciclo de los problemas cotidianos y que te esperan momentos de relajación y placer intenso.
Abandona esta maravillosa experiencia junto a tu pareja, independientemente de la hipóstasis en la que se encuentren. Deja caer, cada uno su turno, todas las barreras mentales, psíquicas o físicas y abre todo tu ser a tu propia sensualidad.
La persona que da el masaje debe estar relajada y descansada
El estado de la persona que da el masaje es muy importante. Es necesario ofrecer algo especial a la persona amada y debe surgir de un estado interior de plenitud y amor profundo.
Recuerda que el masaje erótico es un acto de amor, por lo que tiene que salir del amor, expresar y generar amor y alegría. Si sientes la más mínima presión al pensar que vas a dar un masaje erótico, es mejor que lo pospongas para otro momento.
Además, si estás cansado, no te embarques en esta experiencia porque perderá tu valor para despertar el placer. Debe ser una experiencia total y completa.
Otro aspecto esencial es que tienes que tocar a tu amante para tu propio placer. No intentes excitar a tu amante. Es mejor que intentes descubrir lo que los hace sentir bien a los dos.
Este consejo puede parecer una paradoja para una persona, un masaje sensual, despierta mucho la empatía, lo que hace que la transferencia de los estados emocionales entre ambos sea bastante rápida. En otras palabras, si uno de los dos experimenta un gran estado de placer, el otro también lo experimentará breve e intensamente.
No obstante, al igual que te concentras en tu propio placer al tocar a tu amante, tienes que ser receptivo a las respuestas sensuales de tu amante.
Sé completo en la experiencia que vives al dar un masaje. Olvídate de ti mismo, lo único que hay es el cuerpo de tu amante, inmerso en el placer que le proporcionan tus hábiles manos.
La persona que recibe el masaje debe abandonarse por completo al masaje y a las sensaciones que de él se derivan
Dar un masaje sensual es un arte. Sin embargo, saber recibirlo es también un arte: el arte de ser capaz de abandonarse por completo en las manos de otra persona.
Cuando te den un masaje, relájate por completo y toma conciencia de tu propia receptividad. Relaja tu cuerpo y concéntrate todo lo que puedas en tus sensaciones. El término «concentración» puede sonar impropio asociado al masaje, pero en realidad ser consciente y centrarse en las sensaciones provoca la relajación que acompaña al masaje.
Vuélvete perceptivo y aquieta tu mente. Deja que tu cuerpo hable tu propio lenguaje. Alégrate de ofrecer a tu pareja la posibilidad de manifestarse libremente y expresar tus sentimientos directamente a través del tacto. Disfruta de la beatitud de la caricia, fúndete en el océano del éxtasis y devuelve la emoción de la beatitud en tu amado.
Cuando no es recomendable realizar un masaje erótico
Independientemente de los beneficios que aporta el masaje erótico, hay ciertas situaciones en las que no es recomendable.
He aquí estas situaciones:
- Enfermedad contagiosa o fiebre.
- Hinchazón severa o inflamación aguda en un área del cuerpo.
- Traumas físicos graves.
- Problemas psíquicos severos.
Conclusión
En el hombre contemporáneo, el estrés y la falta aguda de confianza en sí mismo provocan una tensión crónica en su cuerpo. Esta tensión bloquea la circulación de la sangre, y de la energía, que a su vez disminuyen su capacidad de funcionar normalmente.
Por último, estos bloqueos crean obstáculos en el camino de la alegría provocada por la sexualidad y la capacidad de experimentar orgasmos prolongados e intensos.
La función del masaje erótico es garantizar la libre circulación de la energía sexual. De este modo, se liberará la energía atascada en los miedos y se resolverán los conflictos internos que rodean la sexualidad y las relaciones.
El masaje erótico puede conducir a una vida sexual más feliz, saludable y satisfactoria.